Ortodoncia lingual: tratamiento, precio, ventajas y desventajas
Los brackets linguales son aparatos de ortodoncia que no se ven, pero son muy eficaces para enderezar los dientes. Se colocan detrás de los dientes y funcionan como los aparatos tradicionales sin ser visibles desde el exterior.
En este artículo te explicamos todo sobre estos aparatos, cómo funcionan y si son realmente efectivos.
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¿A qué edad se puede utilizar la ortodoncia lingual?
La ortodoncia lingual no es adecuada para los niños en crecimiento, ya que sus dientes no suelen tener suficiente superficie para colocar los aparatos. Los brackets linguales se usan exclusivamente en adolescentes y adultos.
Sin embargo, no todos los adultos pueden usar este tipo de ortodoncia. La decisión final queda en manos del ortodoncista, ya que este tratamiento no es compatible con algunas personas, especialmente las que tienen dientes cortos.
¿Para qué sirve la ortodoncia lingual?
La ortodoncia lingual puede utilizarse para tratar muchos problemas, tanto estéticos como funcionales. Puede utilizarse para alinear los dientes malposicionados, por ejemplo dientes rotados, separados o que se superponen. La ortodoncia lingual también se utiliza para corregir la alineación o los espacios interdentales antes de colocar retenedores nocturnos o implantes.
Además, como los brackets tradicionales, se puede utilizar para tratar maloclusiones que provocan problemas de masticación, deglución y a veces del habla.
El tratamiento con aparatos linguales suele durar entre dieciocho y veinticuatro meses, mientras se corrige el problema ortodóntico.
¿Cómo se colocan los brackets linguales?
El ortodoncista comenzará tomando impresiones de tus maxilares. Este molde sirve de base para elaborar los aparatos a medida.
La ortodoncia se coloca en una sola sesión en la que los brackets linguales se pegan y se fijan a la cara interna de los dientes. A continuación, se establece un calendario de consultas de seguimiento y readaptación, consultas que se realizan cada cuatro a seis semanas.
A medida que los brackets van corrigiendo el problema, el ortodoncista los apretará para aumentar su poder de tracción. También comprobará que no corres el riesgo de sufrir efectos secundarios, como el desarrollo de gingivitis o caries.
Los primeros días de tratamiento pueden ser un poco dolorosos debido a la tensión que los aparatos ejercen sobre los dientes, pero te acostumbrarás rápidamente. Si sigues experimentando molestias después de unos días, es probable que los brackets se hayan ajustado incorrectamente y estén demasiado apretados. En este caso, debes volver al ortodoncista lo más pronto posible para reducir la tensión.
Ten cuidado durante los primeros días, ya que corres el riesgo de cortarte la lengua. Esta se ubica de forma natural contra los dientes y tendrás que adaptarte para dejar de sentir molestias, especialmente al comer y al hablar.
Por último, es posible que al principio se produzca un poco de ceceo, pero deberías recuperar rápidamente tu forma regular de hablar.
Al final del tratamiento, el ortodoncista estabilizará el trabajo con un retenedor que tendrás que llevar durante unos meses más. Este puede ser un retenedor fijo (un alambre que se adhiere en la cara interior de los dientes), o una pieza bucal extraíble que se lleva solo por la noche.
¿Por qué elegir la ortodoncia lingual? Ventajas de los brackets linguales
Los brackets linguales son tan eficaces como los convencionales, así que su elección suele ser estética. Para un adulto, llevar brackets puede ser una fuente de vergüenza, así como un problema profesional para cualquiera que tenga contacto regular con el público.
Por otro lado, el uso de aparatos de ortodoncia puede manchar los dientes, lo que no es un problema si las manchas están en la cara interior no visible.
Desde el punto de vista de la comodidad, tras un breve periodo de adaptación, el paciente se acostumbra y se olvida de que lleva ortodoncia.
¿Cuáles son las desventajas de llevar aparatos linguales?
Los brackets linguales dificultan un poco el proceso de cepillarse los dientes, pero los aparatos convencionales tienen el mismo efecto. Debes prestar mucha más atención a tu higiene bucal y tener cuidado de limpiar los restos de comida atascados entre los aparatos y los dientes.
Cuando usas ortodoncia lingual, debes evitar ciertos alimentos. Cualquier alimento duro puede dañar los aparatos, cualquier cosa fibrosa puede atascarse en ellos, y cualquier cosa pegajosa puede acumularse y favorecer la formación de placa y caries.
También lleva un tiempo acostumbrarse a hablar correctamente sin provocar microcortes en la lengua.
Pero la desventaja principal de este tratamiento es su coste, mucho más elevado que el de los brackets normales. Para el ortodoncista, trabajar en la parte interna de los dientes es más complicado y, por tanto, lleva más tiempo, no solo durante la instalación, sino también en cada visita de control y reajuste.
Además, no todos los ortodoncistas pueden colocar brackets linguales: para ello debe haber hecho una especialidad. Si estás interesado en este tratamiento, habla con tu dentista, quien te podrá orientar sobre los ortodoncistas que estén calificados para este trabajo.
¿Cuánto cuestan los brackets linguales?
El coste de la ortodoncia lingual oscila entre los 4.500 y los 8.000 euros, lo que supone entre dos y cuatro veces el precio de la ortodoncia convencional. Pero esto dependerán de lo que cobre tu ortodoncista, de la duración del tratamiento, del fabricante que elijas y del número de consultas que se necesiten para ajustar los aparatos a medida que se corrige el problema. En general, seis meses de tratamiento suelen costar unos 1.500 euros.
Además, al tratarse de una especialidad, el precio que cobra el ortodoncista puede ser mucho más elevado que el de un ortodoncista promedio.
La ortodoncia, ya sea con brackets regulares o linguales, no está cubierta por la seguridad social ni por los seguros dentales privados. No obstante, puedes preguntar a tu seguro qué tipo de descuentos y reembolsos ofrecen. Pide a tu ortodoncista una estimación detallada de los costes que podrás entregar a tu compañía de seguros para optar a estos beneficios.
¿Cuáles son las alternativas a la ortodoncia lingual?
Hoy en día, cada vez más pacientes recurren a los alineadores dentales transparentes. Son tan discretos como la ortodoncia lingual, pero suelen ser un poco más baratos.
Aunque Invisalign ha sido el líder indiscutible del mercado durante casi 20 años, en los últimos años han surgido muchas otras marcas con precios más asequibles. DrSmile, por ejemplo, ofrece tratamientos a distancia desde 33 euros al mes. Si quieres saber si tu caso es compatible con este tratamiento, no dudes en pedir una cita con un dentista de DrSmile:
Preguntas frecuentes
¿Duelen los brackets linguales?
Es de esperar que se produzcan molestias durante los primeros días, así como en cada ajuste del alambre, pero esto también ocurre con la ortodoncia convencional. Además, las heridas y llagas en la lengua suelen ser comunes puesto que esta roza constantemente los brackets.
¿Los aparatos linguales provocan ceceo?
Hay un periodo de adaptación tras la colocación de la ortodoncia lingual y puede que te resulte difícil pronunciar ciertos sonidos durante unos días, pero deberías volver a pronunciar correctamente en poco tiempo.
Sociedad Francesa de Ortopedia Dentofacial: L’orthodontie linguale.
Universidad de Nantes. GERBER Romain. La evolución de la ortodoncia lingual desde 1975 hasta la actualidad.
Revista de Odontoestomatología. Martine Philippart-Rochaix. Sobre las críticas a la ortodoncia de adultos por el método lingual: una respuesta razonada.